
Cómo vencer a Dragón akásico en Final Fantasy XVI. En todas las confrontaciones contra líderes hasta ahora, el enfrentamiento con el Dragón akásico en Final Fantasy XVI se distingue, siendo la primera vez que Clive se mide frente a un dragón. Esta batalla se desarrolla en la misión La maldición de los cristales, localizada en Drake’s Head, en el territorio de Sanbreque.
A lo largo de su periplo por Sanbreque, Clive, Jill, Torgal y Cid se topan con un dragón afectado por una maldición. En presencia de figuras dominantes en su territorio, el Dragón akásico se torna agresivo y embiste al equipo sin previa advertencia en FF16. Es una contienda desafiante con el jefe; se sugiere un nivel mínimo de 22 para enfrentarlo.
Te aconsejamos equiparte con la espada de mayor poder que tengas a disposición. Usa colgantes que potencien el ataque y fortalezcan la defensa. No olvides tener el elixir Steelskin al alcance y configurado en un acceso directo para reforzar tu defensa.
A continuación, te ofrecemos un desglose exhaustivo de cómo vencer a Dragón akásico en Final Fantasy XVI.
Cómo vencer a Dragón akásico en Final Fantasy XVI
En Final Fantasy XVI, frecuentemente te toparás con poderosos adversarios a los que enfrentarte. Aunque eres un Dominante, puede que en ocasiones te sientas superado. Esta sensación es palpable cuando te enfrentas al Dragón akásico, quien surca los cielos y desata furiosas llamaradas sobre el terreno.
En este combate, contarás con la compañía y apoyo de Cid, Jill y, evidentemente, Torgal. Ellos te proporcionarán un refuerzo adicional en el poder de ataque, mientras que el dragón focaliza su furor en Clive. Enfrentar a un oponente de tal magnitud implica la necesidad de esquivar constantemente sus llamaradas y afiladas garras.
Cómo derrotar a Dragón akásico en Final Fantasy XVI
- Primera fase
El Dragón akásico usualmente inicia el combate lanzando un proyectil ígneo hacia ti, el cual puedes evitar sin mayor dificultad. A medida que la batalla continúa, esta táctica podría variar, y el dragón podría soltar hasta tres proyectiles ardientes de manera consecutiva. Por lo tanto, es crucial prestar atención a su hocico y detectar si está generando estas llamaradas.
Sorprendentemente, el Dragón akásico puede ejecutar un giro aéreo descendente, lanzándose desde lo alto directamente hacia ti mientras rota. Si logras evadir el movimiento inicial, continúa moviéndote de lado a lado. Al final de su maniobra, el dragón frenará deslizándose por el terreno, y si te encuentras en su trayectoria, podrías recibir daño.
Cuando el dragón se encuentra en tierra, puede balancear su cabeza de un lado a otro tratando de impactarte o atraparte con sus fauces. Al eludirlo hacia un lado, prepárate para esquivar nuevamente cuando intente alcanzarte moviendo su cabeza en el sentido contrario.
El dragón tiene la capacidad de apoyar una de sus alas en el suelo y realizar un giro completo. Esto implica que necesitas ajustar tu esquiva cuando el ala se aproxime.
Asimismo, mientras está en tierra, puede alzarse sobre sus patas posteriores y emitir un haz láser directo, que te perjudicará si te alcanza. A partir de la línea luminosa en el suelo, se forma un área brillante en tono carmesí que detonará con fuerza tras unos instantes.
Así que, al evadir el haz, convendría que te desplaces hacia atrás o hacia un costado, alejándote del trayecto del rayo, para evitar quedar en la zona de detonación.
De vez en cuando, el dragón podría alzar una de sus alas y azotarla verticalmente delante de él.
Desearás moverte hacia un costado cuando el ala descienda, pero si puedes, trata de moverte hacia el lado donde esté posicionada la cabeza del dragón. De lo contrario, el ala funcionará como una barrera que te impedirá acercarte y aprovechar al máximo el daño mientras el dragón se recompone tras el embate.
Además, el dragón tiene la capacidad de ejecutar algunos ataques desde el aire, como lanzar bolas de fuego y una variante del mencionado ataque con rayo láser. La estrategia para estos es idéntica a sus contrapartes en tierra; esquiva según lo requieras.
- Segunda fase
Una vez que el dragón salga de su estado de aturdimiento, se elevará en el aire y circundará el puente. A continuación, iniciará el movimiento «Piroaliento», donde se ubicará en una punta del puente y arrancará una bola de fuego, desplegando llamas en un patrón zigzagueante a medida que se desplaza por todo el puente.
Puedes intentar correr y posicionarte detrás del dragón para evadir completamente las llamas, o anticiparte y esquivar en el momento justo cuando las llamas alteren su curso. Es poco común que este ataque se desarrolle de lado a lado en el puente, lo cual facilita su evasión, ya que solo una porción reducida del puente se ve afectada.
El Dragón akásico también tiene la capacidad de hacer un giro aéreo, utilizando este movimiento para lanzar su cola en tu dirección. Es raro que este ataque impacte incluso si no lo esquivas, pues la elevación del dragón genera una separación, y tendrías que estar prácticamente frente a él y cerca para que su cola te alcance.
Hacia el final de este enfrentamiento, el dragón despliega una versión lateral de su ataque láser, acompañado de las mismas explosiones de área que surgen del terreno.
Aunque la estrategia para esquivar es similar, es importante recordar que, si el dragón inicia con este ataque, su versión vertical le seguirá de inmediato, o al revés. Por lo tanto, durante esta serie de ataques, deberás estar en constante movimiento y esquivar hasta que ambas ondas explosivas hayan sucedido.
La «Danza dragontina» es una maniobra que el dragón ejecuta raramente cuando tiene un indicador de energía bajo. En este movimiento, se alzará sobre sus patas posteriores, lanzará llamas al cielo, flotará en su posición y posteriormente te disparará una serie de bolas de fuego durante un corto lapso.
Después, ejecutará los ataques con rayos láser, tanto horizontales como verticales, de manera consecutiva y rápida. Finalizará su serie de ataques con un descenso en espiral, soltando llamas al hacerlo.
Por vencer al Dragón akásico, recibirás las siguientes recompensas:
- Experiencia 90
- Puntos de habilidad 120
- Guile 3000
- Piel ensangrentada x10, Meteorito x2, Sangre negra x1

